Las posturas nos ayudan a conectar el cuerpo con la mente
Con frecuencia se piensa que las posturas o asanas (en sánscrito) son una forma de ejercicio, pero realmente son técnicas para que nuestro cuerpo desarrolle la conciencia y el equilibrio cuando adoptamos la postura.
Nuestro cuerpo se vuelve más flexible, gana resistencia y se mantiene fuerte liberándose de toxinas.
Los hatha yoguis descubrieron que cuando se desarrolla el control del cuerpo por medio de las asanas, también es posible controlar la mente y la energía
Las posturas pueden ser de flexión, de torsión, invertidas, de equilibrio, de meditación o de relajación:
Posturas de flexión
Las posturas de flexión trabajan la espalda y la parte posterior de las piernas, proporcionan un estiramiento a toda la columna y a los músculos isquiotibiales.
Posturas de torsión
Las posturas de torsión son importantes para la salud de la columna. La torsión de la columna y del tronco ejercitan los músculos, dan flexibilidad a la columna vertebral y estimulan los nervios de esta área.
Posturas invertidas
Las posturas invertidas estimulan el suministro de sangre hacia el cerebro, nutriendo las neuronas y eliminando toxinas.
Posturas de equilibrio
Las posturas de equilibrio mejoran la coordinación muscular y la postura, nos ayudan a lograr un equilibrio físico y a fortalecer el sistema nervioso.
Posturas de meditación
Las posturas de meditación nos permiten permanecer sentados durante un período de tiempo prolongado sin mover el cuerpo y sin sentir incomodidad.
Posturas de relajación
Las posturas de relajación parecen muy fáciles al principio, pero hacerlas correctamente es más bien difícil porque es necesario relajar de manera consciente la tensión de todos los músculos del cuerpo.
¿Quieres saber más sobre las posturas y sus beneficios?
En el blog puedes encontrar distintos posts con información.
Un grupo de posturas bien seleccionadas, junto con técnicas de pranayama y meditación, forman parte de una sesión para activar la energía dormida.